miércoles, 2 de septiembre de 2015

Un día, común, aburrido.. Te pones a dedicarle tiempo a tus redes sociales como cada día. Ves una foto de un niño pequeño leyendo en la calle, sonríes, te gusta verlo hasta que haces la foto en grande y lees lo que pone en ella. Te cambia la cara, tu sonrisa se da la vuelta e intentas aguantar tu impotencia. ¿No duele que la gente a la que le guste leer sean bichos raros? Vuelves a revisar la foto y recuerdas cuantos libros has leido, no solo los que te imponen en clase. Cuantas veces te han hecho sentir rara por tener un libro en las manos y en ese instante, justo ahí recuerdas cuando a principio de curso hasta tu profesora dijo que eras rara por amar la lectura. Y entonces vuelves a hacerte la misma pregunta de aquel día ¿Qué pasa por encontrar tu vía de escape entre letras, palabras, hojas...? ¿por qué eres tú la rara y no lo son ellos? Te duele ver que cada vez menos gente aprecia ese arte pero a la vez, sabes,que sigen habiendo incomprendidos como tú. 




 

No hay comentarios:

Publicar un comentario